En diciembre de 1949 tuvo lugar un importante acto de resistencia de las mujeres en Costa de Marfil: la marcha de las mujeres en Grand Bassam. La larga marcha salió de Abidijan hasta llegar a la ciudad de Grand Bassam, la primera capital de Costa de Marfil en la época colonial entre 1893 y 1900, donde se ubicaban los principales tribunales del país y una de sus cárceles más conocidas. El acto quería denunciar la detención sin juicio de los líderes políticos de la Agrupación Democrática Africana [Rassemblement Démocratique Africain – RDA], una federación de partidos políticos africanos anticoloniales.
El 22 de diciembre, las mujeres salieron de Abidiján y fueron caminando por una distancia de 40 km hacia Grand Bassan, organizadas en pequeños grupos con la intención de confundir la vigilancia de la administración colonial francesa. El 24 de diciembre, ya cerca de su destino final, las mujeres fueron arrestadas, atacadas con gases lacrimógenos y golpeadas por soldados franceses.
«¡Mis hermanas beté, bao ulé, dioula y de todas partes, no tengan miedo! No es porque nos atacan con chorros de agua con arena que nos vamos a desanimar, porque una persona que quiere ir al rescate de su marido, de su hermano, de su hijo no va a retirarse ante tan poco”, había dicho Marie Koré, según una investigación de Henriette Diabaté, autora de La marcha de las mujeres en Grand-Bassam [La marche des femmes sur Grand-Bassam].
Si bien la primera manifestación terminó con muchas personas heridas por la violencia de las fuerzas represivas, la movilización de alrededor de 500 mujeres, entre militantes y familiares de los detenidos, tuvo victorias: los militantes detenidos fueron juzgados, liberados o tuvieron sus condenas reducidas. La lucha de Koré y de otras mujeres como Anne-Marie Raggi, Odette Ekra, Lorougnon Zikaï fue emblemática para la independencia de Costa de Marfil y es una referencia política hasta hoy en día.
En una entrevista concedida a Capire, Solange Koné, de la Marcha Mundial de las Mujeres en Costa de Marfil, recuerda que cuando Marie Koré “lanzó este llamado a la unión, aparecieron mujeres de todas partes. Ellas caminaron con tanta determinación que las fuerzas militares no pudieran detenerlas. Así pudieron liberar a sus maridos. Marie Koré es un símbolo de Costa de Marfil”, dice Solange.
Marie Sery Koré nació en el pueblo de Gossa, en Daloa, entre 1910 y 1912, y murió en 1953. Fue una figura temida por los colonialistas por su capacidad para involucrar a las mujeres en la lucha por la independencia. Su historia se une a la de tantas otras mujeres africanas que estuvieron en el centro de la lucha contra la dominación colonialista europea.
Integrante de la RDA, fue presidenta del Comité de Mujeres del Partido Democrático de Costa de Marfil [Parti Démocratique de la Côte d’Ivoire – PDCI] en Treichville, una comuna de Costa de Marfil donde se abrió un alocódromo, un lugar donde se venden plátanos fritos, actividad generadora de ingresos y que empleaba a mujeres en la región.
Hay sospechas sobre la muerte de Marie Koré. La líder murió mientras recibía tratamiento por una simple enfermedad en el hospital adyacente en Treichville. Hay sectores que creen que fue asesinada por su lucha política anticolonial, ya que, en ese momento, el hospital era administrado por médicos europeos.
El puente sobre la laguna de Ouladine, entre Grand-Bassam y Abidijan, fue bautizado con el nombre de Puente de la Victoria», en memoria a la resistencia de las mujeres que marcharon para enfrentar las injusticias de la detención y del colonialismo.